Choripán, tan sencillo como popular, encabeza la oferta típica de la gastronomía de Argentina, Uruguay y Chile. Se prepara generalmente con pan francés y chorizo asado a la parrilla y, a diferencia del de otras zonas, se utiliza sin desecar ni ahumar, usándose casi fresco directo a las brasas. El condimento típico son salsas como chimichurri (aderezo típico argentino elaborado con perejil, ají y orégano) o salsa criolla. Su popularidad alcanza a incluirlo entre uno de los diez platos favoritos de Argentina; su preparación se ha difundido al resto de países de la región como Bolivia, Colombia, Paraguay, Perú y Cuba.
Según fuentes historiográficas, en la región del Río de la Plata el origen del choripán se remonta a mediados del siglo XIX, cuando en las zonas rurales los gauchos realizaban asados y agregaban achuras y distintos cortes, dando inicio al hábito de comer el chorizo dentro de un pan. Esta práctica con el tiempo llegó a las ciudades y se popularizó en el entorno urbano.
Hoy está vinculado a los partidos de fútbol, donde se ofrecen en parrillitas ambulantes, a reuniones de amigos y a los asados familiares. Su localización más típica es en los carritos de la costanera, aunque también se encuentra en el menú de restaurantes y bares.
El choripán, considerado como la «comida callejera por excelencia»,aunque hace poco tiempo apareció en la creciente oferta gastronómica de Palermo un local exclusivo Chorix, donde sóloo venden sándwiches de chorizo y de morcilla
