Ya sea porque crece el número de veganos, por tendencias de alimentación saludable o simplemente porque se extendió su uso, cada vez son más quienes eligen este tipo de leche, que en algunos casos llegan a elaborarla los propios consumidores bajo un procedimiento elaborado de hidratación y proceso del producto.
La leche de almendras tiene un contenido calórico aún más bajo que la leche de soja. En comparación: una taza de leche de vaca entera tiene 140 calorías, una de leche de arroz 120 calorías, la leche de soya 80 calorías y la leche de almendras apenas 40 calorías y un alto nivel de fibra, que ayuda a regular la absorción de los azúcares y controlar niveles de colesterol.
Algunos de sus beneficios:
- Su bajo contenido calórico la hace ideal para dietas
- La leche de almendras es fácil de digerir y es recomendable para todos los intolerables a la lactosa
- La fibra de la leche de almendras protege la pared de los intestinos
- En numerosos casos, las personas que padecen de gastritis o problemas gastrointestinales cambian su dieta y agregan leche de almendras porque regula sus funciones
- La vitamina B2 presente en la leche de almendras ayuda a que las uñas y el pelo se fortalezcan y que la piel tenga una mejor hidratación