Ajo, hierbas frescas, especias como romero, orégano, tomillo, ají molido; perejil, aceite de oliva y sal gruesa son los básicos para condimentar previo a la cocción, esta tendencia que crece.
El debate es amplio y tiene sus amantes y detractores. Esta modalidad de muchos países anglosajones ha llegado al país de la carne y muchos restaurantes la han adoptado porque consideran que agrega sabor a todos los cortes. Quienes se oponen argumentan que la calidad, sabor, textura propia de la carne argentina y sus cortes más buscados- colita de cuadril, tapa de asado, entraña- se solapan cuando se dejan macerar con sabores agregados.
Las variantes son condimentar desde dos horas antes y algunos prefieren un período mucho más largo de un día para el otro en la heladera. Quienes eligen esta técnica de preparación además suelen sellar la carne por todos sus lados antes de llevarla al horno.
Moda, tendencia, pasajera o para quedarse, vale la pena probar esta variante que cada vez se extiende más en nuestro país, comparar y elegir nuestra manera de consumir la carne.